Por Gisela Williams
En 1894 se descubrió petróleo en Corsicana, Texas, lo que convirtió a la ciudad en la primera del estado con auge petrolero. Para finales de los años 50, su elegante centro había caído en deterioro. Cuando las hermanas Katharine y Susan Hable crecían allí en los años 70, “se sentía un poco como un pueblo fantasma”, cuenta Susan, quien ahora es artista y dirige una empresa de diseño con su hermana en Atenas, Georgia. Pero en 2022, cuando Katharine volvió a mudarse a su ciudad natal y Susan fue a ayudarla a buscar un lugar, descubrieron una comunidad creativa en crecimiento. “Sentí una energía que antes no existía”, dice Susan. Encontraron una residencia artística muy interesante llamada 100 W Corsicana.
Decidieron comprar un edificio de dos pisos en el centro y, tras dos años de renovación, lo transformaron en una galería, que abrió el mes pasado. La planta baja exhibe una mezcla de obras de Susan —incluyendo collages orgánicos de papel cortado, esculturas abstractas en cerámica, yeso y bronce— así como una colección de joyería que creó recientemente en Jaipur, India. El piso superior albergará talleres de arte, eventos comunitarios y cenas ocasionales. “Si logramos exponer a la gente a algo que nunca ha visto, entonces la mitad de nuestro trabajo está hecho”, dice Susan.
