Por Laura Regensdorf
“Por sencillo que parezca un chongo, la clave está en los detalles”, dice el estilista James Pecis. Un chongo puede armarse de manera casual o con precisión, alto o bajo, con un acabado impecable. Hablamos con tres expertos que saben cómo adaptar este estilo a cualquier estado de ánimo: Devon Teuscher, primera bailarina del American Ballet Theatre; James Pecis, fundador de la marca Blu & Green, y Tracee Ellis Ross, actriz y fundadora de Pattern Beauty, quien ha convertido los chongos altos con textura en su sello personal.
James Pecis, 44 años, peluquero

El pelo necesita suficiente tracción o agarre para mantenerse en su lugar. Si está sucio, utilizo el champú en seco de Blu & Green, que se adhiere a los aceites naturales; si está limpio, aplico un polvo texturizante, como el Swept Up de Oribe.
Para hacer la coleta que servirá de base para el chongo, el truco es alisar todo el pelo hacia atrás, desde el cuero cabelludo, con un cepillo desenredante o un peine de dientes anchos. Para una superficie aún más lisa, usa un cepillo de cerdas de jabalí y nailon y un poco de spray, como el de Superfine de Oribe, que ayuda a controlar los cabellos sueltos.
Cardar la coleta antes de torcerla le dará más volumen al chongo. Envuelve firmemente el pelo alrededor de la base de la coleta, metiendo las puntas. Cuantos menos pasadores uses, mejor, ya que habrá menos riesgo de que algo salga mal. Evita los pasadores con puntas afiladas que puedan dañar el cuero cabelludo. La estilista Odile Gilbert ha diseñado un pasador grande que se adapta a la cabeza, el accesorio capilar más sencillo del mundo.
Devon Teuscher, 36 años, bailarina

Como muchas otras cosas en el ballet, los chongos buscan crear líneas estéticas. Para uno clásico al estilo Balanchine necesitas una línea diagonal continua desde la mandíbula hasta los pómulos, con el chongo en el punto más alto.
Para las presentaciones, nuestro equipo usa pasadores Nigel de alta calidad, que no pierden su firmeza ni sujeción. Son bastante grandes, del tamaño de un dedo índice, y también existen en tamaño mini para fijar postizos o cabellos sueltos. No son brillantes, por lo que se mezclan bien con el pelo.
El pelo sucio es mejor para los chongos de ballet. Usamos el Thickening Dryspun Texture Spray de Bumble & Bumble para dar más textura y fijación, especialmente en las raíces. También utilizamos el Holding Spray de Bumble & Bumble para una fijación fuerte.
Después de cada espectáculo, me doy un masaje en el cuero cabelludo con un cepillo Scalpmaster de cerdas metálicas durante cinco minutos. Después de usar un chongo tan apretado, un masaje en el cuero cabelludo es un alivio.
Tracee Ellis Ross, 52 años, actriz

Un chongo bien peinado permite que mi rostro sea el centro de atención. Mis joyas favoritas son mis pómulos y clavículas, y este estilo me hace sentir segura y elegante.
No me gustan los recogidos con cabellos sueltos. Soy muy meticulosa. Primero divido mi pelo en secciones con pinzas de Pattern. Luego, trabajo desde abajo hacia arriba con un cepillo paddle, aplicando una buena cantidad del acondicionador sin enjuague de Pattern para así lograr un acabado brillante. Finalmente, aplico la crema para peinar, también de Pattern, y aliso todo con un cepillo para contornos.
Tengo tres variaciones de chongo. El alto es mi favorito para manejar, hacer ejercicio o recibir tratamientos faciales; el bajo lo llevo bien liso o con raya en medio, y mi chongo de ballet sigue la línea de la oreja hacia arriba. Para cada uno, primero trenzo la coleta antes de envolverla. Para alfombras rojas, lo aseguro con pasadores de Pattern.
T Recomienda
Trophy Shine + Texture Spray, de R+Co.
Yuzu + Plum Oil Sleek Stick, de Briogeo.
The Finishing Spray, de Crown Affair.
Estas entrevistas han sido editadas y condensadas.